«Son 190 años de usurpación británica. Es tiempo de innovar y hacer uso del derecho que nos asiste en el reclamo de soberanía, fortalecer la Democracia. En un nuevo año, advertimos un deterioro de la calidad institucionalidad de la democracia, por ello hacemos un llamamiento a las fuerzas políticas. No hay soberanía posible cuando queda cada día más en evidencia que el Poder Judicial de la Nación está en manos de una corporación política ajena a la defensa de los intereses nacionales, y peor aún, ajenos al mandato que todo ciudadano argentino tiene, que es Defender la Soberanía Nacional», indicaron desde el Cecim de La Plata a través de un comunicado.
Los veteranos de Guerra señalaron que los jueces de la Corte Suprema de la Nación, «nada hacen con causas que están directamente ligadas a temas de soberanía».
«Hoy los Ministros de la Corte envían a sus “bufones” a planificar junto a (el magnate) Joe Lewis, representante de los intereses británicos en la Argentina, en el usurpado Lago Escondido, un escenario para alejar a nuestro pueblo de usufructuar en el futuro de los vienen naturales que este territorio nos ofrece», afirmaron.
Finalmente, aseguraron que los ex soldados conscriptos, combatientes en Malvinas, «sufrieron las consecuencias de una Corte Suprema que no ha sido capaz de analizar la cuestión de fondo sobre las torturas, vejaciones y graves violaciones a los derechos humanos» que sufrieron durante la Guerra por las Islas Malvinas.
Las Islas Malvinas formaron parte del área bajo jurisdicción de España desde la entrada en vigor de los primeros instrumentos internacionales que delimitaron el «Nuevo Mundo» poco después del descubrimiento de 1492.
El 6 de noviembre de 1820 el coronel de la Marina argentina David Jewett tomó posesión oficial de las Islas Malvinas en nombre de las Provincias Unidas del Río de la Plata, izando la bandera argentina por primera vez. Asimismo, el gobierno argentino procedió al dictado de normas y al establecimiento de las estructuras jurídicas y administrativas que consolidaron el ejercicio pleno de su soberanía, incluyendo el fomento al desarrollo de actividades comerciales y el establecimiento de población.
Sin embargo, el 3 de enero de 1833 dicho ejercicio efectivo de la soberanía fue interrumpido mediante un acto de fuerza ilegal británico, y desde entonces, subsiste una disputa de soberanía entre la República Argentina y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, tal como fuera reconocida por la Asamblea General de las Naciones Unidas mediante la resolución 2065 (XX).
«Cumpliremos este 2023 cuarenta años en democracia, la República Argentina sostiene dentro del derecho internacional y en el marco de las resoluciones de la ONU el reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas, Geórgicas del Sur y Sándwich del Sur de los territorios usurpados en 1833 por Gran Bretaña, pero con una Corte jugando en contra de los intereses argentinos todo ello es en vano», concluyeron.