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El jefe de los negociadores del Gobierno de Colombia en el diálogo con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), Otty Patiño, afirmó que el comandante de la organización guerrillera, Antonio García, «no ha entendido» la política de «paz total» proclamada por el presidente Gustavo Petro.
García «no ha entendido la significación de lo que es la paz total», dijo Patiño a periodistas, seis días antes de la fecha prevista para que las partes reanuden las conversaciones en México, según la agencia de noticias AFP.
«El Gobierno no se ha puesto a tono con lo acordado en la Mesa (del diálogo); si el ELN sigue siendo considerado GAO (grupo armado organizado), quiere decir que seguimos en el mismo punto que lo dejó (el expresidente Iván) Duque, o sea no despegamos como debería ser», afirmó García en Twitter.
Patiño replicó que «al ELN, desde el comienzo, se le dio un tratamiento político, pero ellos también tienen el deber de mostrarle al país que su actividad es básicamente política y que tienen una mirada de poder hacer política sin armas».
Si el diálogo de paz «se estanca vamos a descubrir un ELN que no está interesado en la política sino en los negocios, lo cual sería una decepción», agregó el funcionario.
Los roces entre el Gobierno y el ELN comenzaron luego de que Petro anunciara en la víspera de fin de año un supuesto acuerdo bilateral de cese del fuego, que el grupo guerrillero desmintió tres días después.
Ese malentendido motivó que las partes volvieran a reunirse el mes pasado en Caracas, pese a que habían previsto que la continuidad del diálogo tendría como escenario la Ciudad de México.
El Gobierno de Colombia y el ELN habían iniciado conversaciones de paz en 2016, cuando el presidente era Juan Manuel Santos, quien acababa de firmar un acuerdo similar con las FARC.
Pero esas negociaciones fueron congeladas en 2018 por el sucesor de Santos, Duque, después de que el ELN atentara contra una escuela de policía y dejara 22 muertos.
La reanudación del diálogo fue una de las prioridades de Petro desde su campaña electoral y luego a partir de su asunción, en agosto pasado.
Las partes se reunieron en Caracas a partir del 21 de noviembre y hasta mediados de diciembre, cuando anunciaron que reanudarían las conversaciones en México, pero volvieron a encontrarse en la capital venezolana a mediados de enero, tras el entredicho por el cese del fuego.
Con unos 3.500 combatientes, el ELN tiene una estructura federada, con relativa independencia entre sus frentes, lo que dificulta un eventual acuerdo, según expertos.
