Unicef, preocupado por asunción en cargos de procesados por supuesto abuso sexual en Paraguay
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) mostró hoy su preocupación por el hecho de que personas procesadas por supuestos casos de abuso sexual contra niños, niñas y adolescentes asuman cargos de representación nacional en Paraguay.
El Fondo de las Naciones Unidas manifestó en un comunicado de prensa que «todo caso de abuso sexual contra niños, niñas y adolescentes constituye una violación a sus derechos y expresa su preocupación por el hecho de que personas procesadas por supuestos hechos de este tipo asuman cargos de representación nacional» tras ser elegidas en los comicios generales del pasado 30 de abril.
El organismo se pronunció un día antes de que presten juramento los elegidos para conformar el Senado y la Cámara de Diputados durante el periodo 2023-2028.
Sin dar nombres, instó «a las instituciones encargadas de la investigación y acusación de los imputados a atender con celeridad los procesos judiciales en los que las niños, niñas y adolescentes son víctimas de este tipo de hechos, de conformidad a lo establecido en el Código Penal y demás leyes pertinentes».
El documento se dio a conocer tras la polémica en Paraguay ante la posible juramentación como senador de Rafael Esquivel, del Partido Cruzada Nacional (PCN), el mismo del detenido excandidato presidencial Paraguayo Cubas.
Esquivel permanece bajo prisión preventiva en la localidad de Ciudad del Este, acusado dentro una causa por los supuestos delitos de homicidio doloso en grado de tentativa y otros. Además, es investigado por el presunto abuso sexual de una niña de 12 años.
Asimismo, Unicef indicó que «aboga para que se adopten medidas concretas para prevenir, denunciar y restituir derechos a las víctimas de casos de abuso sexual infantil y adolescente».
En el documento, el organismo reconoce que «el Estado paraguayo ha hecho avances en cuanto a las medidas de garantías y protección integral de derechos de niñez y adolescencia a lo largo de los últimos 30 años, habiendo manifestado con estas acciones su voluntad de establecer mecanismos efectivos de protección de la niñez y adolescencia».
El texto recuerda que tras la «creación del Código de la Niñez y la Adolescencia, en el año 2000, existe el compromiso del Estado paraguayo de cumplir con los derechos de los niños, niñas y adolescentes», por lo que insistió en que «el llamado a cuidar de los niños, niñas y adolescentes víctimas de toda forma de violencia, abuso y explotación sexual no admite ningún tipo de renuncia ni pausa».
El organismo reiteró su disposición «a proveer apoyo técnico a las instituciones pertinentes para avanzar en el diálogo que el Estado y sus órganos jurídicos consideren necesario, compartir experiencias de otros países y contextos y acompañar los procesos correspondientes».
