Javier Rivero, el escultor tolhuinense y creador de las piezas, dedicó más de un mes para restaurarlas a su estado original, permitiendo a residentes y turistas apreciar nuevamente su belleza. El Municipio de Tolhuin subrayó su compromiso de revitalizar la cultura y honrar a los pueblos originarios a través de estas expresiones artísticas.
La Dirección de Cultura y Educación destacó que “la restauración de estas esculturas no sólo representa una mejora estética, sino también un acto de respeto hacia la historia y la identidad de la región.” Este sentimiento fue eco de los vecinos que solicitaron la renovación de las piezas.
El Municipio hizo hincapié en la necesidad de responsabilidad colectiva en el mantenimiento y conservación de las expresiones artísticas en la ciudad, entendiendo que el compromiso constante con la preservación y promoción de la cultura debe ser una misión comunitaria.
Esta iniciativa simboliza no sólo el valor estético, sino también la conexión profunda con la identidad cultural de la región, fortaleciendo el orgullo y la conexión de la comunidad con sus raíces.