La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) ha dado luz verde al trámite presentado por el ex presidente Alberto Fernández para acceder a la jubilación de privilegio, un beneficio otorgado a todos los ex mandatarios, que asciende a un total de 7 millones de pesos. Según fuentes del organismo, el proceso de otorgamiento se ha cumplido dentro de los plazos establecidos, a pesar de las fuertes críticas de la oposición, que ya había presentado un reclamo formal para impedir el pago de esta pensión especial.
El ex presidente inició los trámites para acceder a este beneficio el pasado 6 de diciembre, cuando aún estaba en funciones como jefe del Poder Ejecutivo. Según ANSES, el proceso se realizó conforme a lo establecido por la Ley 24.01, que otorga la jubilación vitalicia a expresidentes y vicepresidentes, y fue resuelto dentro del plazo habitual de tres meses.
En febrero pasado, cuando se hizo público que Fernández había iniciado el proceso administrativo para recibir esta pensión especial, la legisladora porteña Graciela Ocaña presentó un reclamo formal ante ANSES para evitar que el ex jefe de Estado percibiera este beneficio. Ocaña argumentó que la ley establece que los beneficiarios deben residir en Argentina, y señaló que Fernández había expresado su intención de residir en Madrid después de dejar la presidencia.
En respuesta a estas críticas, Fernández aseguró en sus redes sociales que no tiene intención de radicarse fuera de Argentina y que no busca abusar de privilegios. Sin embargo, Ocaña continuó cuestionando el otorgamiento de esta jubilación, señalando la difícil situación de los jubilados en el país y criticando la gestión del ex presidente durante su mandato.
A pesar de las controversias y los reclamos, ANSES ha aprobado el trámite de jubilación de privilegio para Alberto Fernández, quien recibirá un monto total de 7 millones de pesos como beneficio por su tiempo en el cargo presidencial.